Molcajete es el nombre que recibe en América, en especial en
México y Centroamérica, un tipo de mortero fabricado en piedra
tallada en forma cóncava, en el cual se machacan y muelen
especies, granos y vegetales en poca cantidad.
Este tipo de mortero ha sido empleado en la elaboración de alimentos
desde la época prehispánica en Mesoamérica,
prevaleciendo su uso común hasta la actualidad, aunque ahora se le
utiliza además como plato para algunos tipos de cocimiento al horno,
sobre todo de carnes.
Comúnmente se hace de piedra volcánica de baja porosidad,
aunque también los hay elaborados de barro o maderas duras. Actualmente
incluso se les encuentra hechos de plástico o cerámicas aunque éstos son
más para fines ornamentales, ya que se usan como depósito de salsas
picantes y agregados para platillos, como dando a entender que se
elaboraron de la forma tradicional.
La mano o pilón recibe el nombre de tejolote o temachín y se usa
como martillo para romper y moler contra el hueco del molcajete.
A pesar del uso extendido de la licuadora eléctrica, el molcajete
continúa prefiriéndose en la elaboración de salsas en la cocina popular y
tradicional mexicana, debido a que el sabor proporcionado por la piedra
al ser empleada es único y muy característico.
En algunos restaurantes se llama molcajete a un cocido de carnes con
queso gratinado.